La
técnica es muy simple, les pido que cojan el lapicero y dibujen en el aire
contorneando lo que quieran dibujar, a los peques les parece súper divertido,
los mayores se sienten un poco incómodos al principio, pero la verdad es que yo
creo que resulta una técnica tan fácil como eficaz, ya que al ir
contorneando, ralentizan la velocidad del trazo, se fijan en los detalles, no
conceptualizan, y captan mejor lo que les quiero decir cuando dijo que no se
inventen las cosas si lo que quieren es copiar algo.
Así que ya sabéis, si lo que queréis es aprender a
dibujar del natural, este es un buen ejercicio para empezar. Si no sabéis lo que
queréis dibujar, poneros a contornear lo que tengáis en vuestro campo de visión,
la tele, el sillón, lo que sea. Una vez que hayáis hecho dibujos invisibles es
mucho mas fácil, solo queda hacer los mismos movimientos pero en papel. Animo¡
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